¿Cómo es una sesión online?

 

Una de las cosas que más se preguntan las personas que buscan apoyo profesional de un psicólogo especialista en psicoterapia en estos momentos en los que la distancia social está presente, tiene que ver con qué se puede encontrar cuando concerta una cita de forma virtual.

Al concertar una cita, usualmente, tras las presentaciones, el psicoterapeuta explorará tu motivo de consulta, es decir, qué te ha llevado a solicitar acompañamiento terapéutico en este momento. ¡No hace falta que sea una conversación rígida de preguntas y respuestas!

 

Es súper importante que te encuentres en un lugar que te resulte cómodo y en el que no tengas interrupciones y en el que sientas que tienes la seguridad que necesitas para hablar de ti.

 

De la mejor manera que puedas, explícale lo que te moviliza a buscar ese espacio de trabajo personal. Puede ser algo muy concreto, como por ejemplo: “tengo mucha ansiedad por esta situación”, “me he dado cuenta de que lo llevo mal”, etcétera , o puede ser algo más difuso: “no me encuentro del todo bien y no sé qué me está ocurriendo, quiero explorar más y conocerme mejor”.

 

Después solemos preguntar por antecedentes relevantes: si es la primera vez que esto te ocurre, si ha ocurrido antes, así como cualquier otra información que sea importante compartir con el psicoterapeuta online. También te preguntarán información biográfica y a qué te dedicas, por ejemplo.

 

Finalmente puede preguntarte qué esperas sobre la terapia y puede compartir contigo una impresión inicial sobre lo que tú le has comentado. En este primer contacto, se debe establecer el marco referencial y administrativo del trabajo; es decir, cómo suele ser su forma de trabajar, frecuencia recomendada de las visitas, cuánto duran las sesiones, cuál será la política de cancelaciones y el coste de cada sesión, entre otras cosas.

 

Si estás interesadx en iniciar un trabajo terapéutico y el coste de la sesión es mayor al que puedes cubrir, no te preocupes: háblalo con el profesional y en conjunto valoraréis opciones disponibles si las hay.

 

Es la información fundamental y mínima necesaria que necesitarás para evaluar si quieres iniciar un trabajo psicoterapéutico con el o la profesional. Si surgen dudas sobre lo que habéis conversado, es un buen momento para compartirlas.

 

¿Qué puedo esperar de una sesión online de psicoterapia?

Al ser algo relativamente nuevo, pueden surgir dudas en cuanto a qué esperar y qué se puede conseguir con este formato de intervención psicoterapéutica. La intención de este escrito es describir de una forma clara que cosas pueden ocurrir:

 

• Que surja vergüenza: ante una situación desconocida y nueva es normal, para algunas personas, sentir vergüenza. Sobre todo cuando hablamos de aspectos que son importantes para nosotros y contamos con una distancia física que nos impide valorar elementos que suelen darnos confianza como la postura y cercanía o distancia entre uno mismo y el profesional. La vergüenza es el sentimiento que surge cuando experimentamos una pérdida de dignidad. Es muy importante saber que, aunque el profesional es un ser humano, está preparadx para acompañarte y también acoger lo que sientes.

 

• Que la conexión no sea buena: dependiendo de las zonas o los momentos en los que se establezca la visita a través de Internet, puede haber problemas técnicos ajenos al cliente y al profesional. Es mejor ser sincerxs y reprogramar la visita para otro momento que quedarse con la sensación de que hay malos entendidos o problemas con la conexión.

 

• Que no te agrade el primer contacto: es una posibilidad que también puede ocurrir presencialmente. Te animo a que, en la medida de las posibilidades, puedas ponerle palabras a lo que ocurre si no te sientes cómodx. Si es posible reconducir la situación aclarando aquello que te haya producido incomodidad, seguramente podrás seguir trabajando.
  Si es algo que persiste y que va más allá de algo que tenga que ver con la dificultad que te ha llevado hasta allí, es mejor que te tomes un tiempo y analices a fondo tus necesidades. Lo que surja de esa reflexión puedes comunicarlo e informarle al terapeuta: seguramente sabrá recibirlo y te propondrá alguna posible solución o facilitará nombres de otros colegas con los que puedes contactar. En cualquier caso, es mejor hablar las cosas y no darlas por sentado.

 

Esta nueva forma de trabajo seguramente será una buena opción para muchas personas que tienen problemas con su tiempo y necesitan mayor flexibilidad horaria para poder asistir a su terapia psicológica. Es una práctica que no está exenta de problemas y de elementos por descubrir; sin embargo, vale la pena darle una oportunidad.

 

Si consideras que te vendría bien recibir acompañamiento profesional, no dudes en contactar con un profesional acreditado y formado para tener una primera entrevista o contacto.

 

En el caso de psicólogxs especialistas en psicoterapia, tanto el Consejo General de Psicología como los colegios de psicólogos en las comunidades, cuentan con manuales informativos sobre recomendaciones y código ético para afrontar esta metodología.

 

Si deseas tener más información o te surgen preguntas, puedes escribir en este formulario haciendo click aquí

 

Y si deseas tener información adicional, te invito a que revises el siguiente artículo que habla sobre ello haciendo click en el siguiente enlace de El Pais

 

Alejandro Noriega de Jesús

Psicólogo. Psicoterapeuta